Sharanam
Yoga & Educación social

Mi nombre es Noemí, soy graduada en Educación Social con mención especial en “atención a personas en riesgo de exclusión”.
Tras acabar el grado y haber realizado mis prácticas universitarias con mujeres víctimas de trata y explotación sexual, decidí especializarme en violencia de género. A lo largo de estos años he realizado distintas formaciones en prevención de violencia en el ámbito escolar, mediación intercultural y familiar, resolución de conflictos de forma pacífica.
Como educadora social, mi formación académica, humana y laboral se ha enfocado en el desarrollo de programas y proyectos propios de intervención socioeducativa (desarrollo de talleres sobre prevención de VG y acoso escolar, escuela de padres, HHSS, resolución de conflictos, buenos tratos). He trabajado y hecho voluntariado con diversos colectivos (víctimas de trata y explotación sexual, violencia de género, diversidad funcional). He podido conocer distintas realidades y cómo la segregación afecta al desarrollo humano.
Bajo mi perspectiva educativa doy prioridad a la prevención a la hora de realizar acciones, es desde donde hay que trabajar para conseguir una sociedad más equitativa, más inclusiva, más compasiva, en definitiva una sociedad mejor.
Y es aquí donde hace un par de años empiezo a visualizar el yoga como herramienta para mejorar la vida de las personas y a emplearlo con diferentes colectivos muy diversos (TEA, diversidad funcional, violencia de género).
Hace algo más de cinco años que empecé a practicar yoga y ha sido un camino precioso. Poco a poco he ido integrando esta disciplina en mi día a día, los beneficios que me aporta a nivel mental y físico son infinitos.
Así que en plena pandemia decido empezar a formarme como profesora de yoga, realizando distintas formaciones entre 2020 y 2021 (YTT 200h Hatha y Ashtanga Vinyasa, yoga para niños y yoga para la inclusión, talleres de Yoga sensible al trauma “YST”) donde he conocido a personas increíbles, de las que puedo decir “me han cambiado la vida” y me han ayudado en este precioso camino de transformación personal. Actualmente estoy realizando varias formaciones en distintas disciplinas de yoga.

Por estas cosas que os cuento he escogido el nombre de sharanam para este proyecto. En una palabra de origen sánscrito y viene a significar “tomar refugio”. Como refugio entendemos un lugar que sirve para protegernos del peligro. Sin embargo “tomar refugio” es el acto de depositar nuestra confianza en alguien o en algo que puede ayudarnos.
Creo firmemente que desde la compasión se puede cambiar toda acción y desde esa perspectiva enfoco la vida.